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¿Has notado comportamientos no habituales en tu hijo?
¿Su rendimiento escolar está bajando, se aisla o notas que está angustiado?
¿O simplemente es retraído y quieres que socialice más?
Con el programa de terapia infantil y de juego, el niño expresa espontáneamente la vivencia de su mundo, tanto interno como externo, y la interacción de ambos para que el terapeuta interprete, por medio del simbolismo, su dinámica familiar y escolar y detecte problemas para ayudar a los padres a solucionarlos.
Es una terapia con la que, mediante dinámicas de juego y de forma muy libre, se pueden diagnosticar problemas en el niño, pues en el juego se manifiestan la naturaleza de su personalidad, su carácter, su temperamento y sus reacciones sexuales.
El juego se entiende como aquellas actividades que se disfrutan en su propia ejecución, sin otra referencia que no sea el goce mismo: el propósito del juego en el niño es el simple disfrute, porque es divertido y satisfactorio.
Cuando notes que tu hijo está aislándose de los demás • Cuando han ocurrido eventos importantes en su entorno, como una pérdida, la enfermedad de alguien cercano o un cambio de residencia • Si has detectado que interactúa poco con su entorno o sufre de bullying • Cuando la familia se está separando, como por un divorcio o la partida de uno de sus integrantes.
Mitos alrededor de la terapia infantil
"La psicoterapia es para niños que tienen muchos problemas"
FALSO
Si bien la psicoterapia normalmente suele enfocarse en abordar ciertos conflictos o síntomas que manifiesta el niño, en realidad se trata de un proceso de autoconocimiento que puede apoyar al desarrollo de habilidades como la autonomía, la regulación emocional (identificación y adecuada expresión de emociones), la resolución de problemas y la mejora en las relaciones familiares y sociales. Todas estas habilidades tienen un impacto importante en el desarrollo de una autoestima y madurez plenas.
“Si no te obedece, llévalo a terapia”
FALSO
La demanda de muchos padres al llegar al consultorio tiene que ver con fallas en la disciplina, en ocasiones es difícil observar que detrás de un problema de conducta existen muchas dificultades emocionales. La terapia infantil no tiene por objetivo hacer a los niños más obedientes o moldearlos al gusto de los padres. Los objetivos que se persiguen mejoran la comunicación y resolución de conflictos emocionales entre padres e hijos, pero en muchas ocasiones son los padres los que utilizan estrategias de cambio en casa que permiten mejorar la armonía familiar.
“Los que necesitan terapia son los papás”
VERDADERO
Si bien muchos de los conflictos infantiles están directamente relacionados con el contexto en el que viven, no es necesario que este contexto cambie completamente para que el menor experimente sensaciones de control sobre sus emociones y capacidad para resolver conflictos. Las dificultades ambientales pueden seguir en los distintos contextos y relaciones que el niño pueda tener, pero el haber estado en un proceso terapéutico le brindará herramientas para afrontar los retos de las distintas etapas de la vida.
“Cuando yo era niño no había psicólogos y estoy bien”
FALSO
Siempre han existido psicólogos. La finalidad de la psicoterapia es mejorar la calidad de vida de las personas por medio del autoconocimiento, de esta manera se desarrollan habilidades que permiten enfrentar mejor los distintos problemas de la vida. Si bien todas las personas tenemos la capacidad para conocernos, regularnos y tomar buenas decisiones, generalmente aprendemos por medio del ensayo y el error. La psicoterapia no hará que dejemos de cometer errores, pero sí puede ayudar a que aprendamos más rápido de ellos. Además, en la actualidad los niños y adolescentes están involucrados en contextos de mayor estrés, menor tiempo de contacto con sus padres, cantidades de información mayores a la que pueden comprender, presión social y muchos otros factores que pueden hacer confuso el desarrollo socioemocional.
