O podemos haber perdido a nuestra mascota, y sentir tristeza, enojo y/o desesperación; lo que da como resultado aislarnos de las personas cercanas, muchas veces, por percibir que no comprenden nuestro sentir.
También se puede experimentar la pérdida de un integrante de la familia, a causa de una enfermedad, y tener sentimientos de culpa, desesperanza y pensamientos constantes que nos recuerdan a la persona.
Cuando abordamos el tema de la pérdida, muy a menudo lo asociamos a la muerte, sin embargo, perdemos personas, situaciones, cosas o elementos importantes en nuestra vida como el trabajo, la salud, un bien material, un rol, una etapa de nuestra vida, un plan e incluso aspectos de nuestra identidad.
Es fundamental reconocer los efectos que tiene la pérdida en el cuerpo humano, desde las consecuencias en diferentes áreas de nuestra vida, intensidad y frecuencia, las cuales pueden variar de persona a persona según el grado de vinculación emocional con el objeto. Estas variaciones dependen de factores individuales como la historia personal, el aprendizaje acumulado, las creencias y las herramientas disponibles para enfrentar pérdidas previas.
El proceso de adaptación que tenemos ante una pérdida se llama ‘duelo’, el cual es un proceso de adaptación natural a una nueva realidad, que emerge tras una pérdida significativa, ya sea real o percibida, la cual se manifiesta en diversas consecuencias. Y muchas veces, al sentirlo, nos preguntamos: ¿Qué me está pasando?, ¿Me estaré volviendo loco(a)?, ¿Ya no volveré a ver la vida igual?, ¿Tengo un trastorno?, ¿Estoy deprimido(a)?.
Quiero compartirte que ante este proceso de adaptación, es normal sentirnos de esa forma, podemos transitar por muchas emociones, ya que, el mundo se concebía de una forma específica (con el objeto que se perdió) y ahora toca adaptarnos a la nueva forma de vida.
Permíteme compartirte qué otras cosas puedes experimentar tras el estado de duelo:
Tarde o temprano pasamos por diversas pérdidas a lo largo de la vida, no estás solo(a), en CAPI podemos acompañarte en tu proceso desde la orientación, y si existe algún factor de riesgo para tu salud, complicación o estancamiento en alguna parte del proceso, se pueden adquirir herramientas en psicoterapia para una mejor adaptación. Contamos con especialistas para todas las edades.
Bienvenido a transitar un camino de aprendizaje, donde hay dolor, pero jamás estás solo(a).
Referencias:
2 Kubler-Ross, E. (2001). La Rueda de la Vida. Punto de Lectura.
3 Figueroa, M. J., Cáceres, R., Torres, A. G. Duelo: Manual de Capacitación para Acompañamiento y Abordaje de Duelo. FUNDASIL.
Agosto 17, 2024.
Licenciada por la Facultad de Psicología de la UNAM, Maestra por el Centro de Psicoterapia Cognitiva, especializada en el ámbito clnico, con enfoque cognitivo conductual.
Cuenta con experiencia en población adolescente, adulto y adulto mayor, con desempeño en áreas públicas, privadas y ambiente hospitalario.