Todas las parejas pueden beneficiarse de un acompañamiento terapéutico respetuoso, que escuche su historia sin juicios ni suposiciones. Y aunque algunas experiencias pueden ser compartidas, también es importante reconocer los contextos específicos que atraviesan las relaciones que han estado históricamente invisibilizadas o discriminadas.
No basta con afirmar que un espacio es “inclusivo”. Un verdadero compromiso con la diversidad se refleja en prácticas concretas, como:
Curiosidad genuina y escucha activa: No asumir quién es quién en la pareja, ni su identidad, orientación o dinámica relacional. Cada pareja es única y merece ser comprendida desde su singularidad.
Reconocimiento de múltiples formas de vincularse: Monogamia, poliamor, relaciones abiertas o cualquier otro tipo de configuración relacional. Todas son formas válidas de construir relaciones, siempre que estén basadas en el consentimiento y el respeto mutuo.
Sensibilidad a contextos sociales y culturales: Algunas parejas pueden vivir experiencias de discriminación, estigma o invisibilización que impactan en su relación. La terapia debe poder reconocer esos factores y acompañar sin patologizar (APA, 2021).
Las razones son tan variadas como las relaciones mismas: mejorar la comunicación, resolver conflictos, atravesar una crisis, tomar decisiones importantes o simplemente fortalecer el vínculo. La terapia no es solo para “arreglar” algo, sino también para cultivar lo que importa: la intimidad, el compromiso, el cuidado mutuo. En algunos casos, puede ser el primer lugar donde la historia de una pareja es escuchada sin filtros ni suposiciones, donde no hay que justificar quiénes son o cómo se aman.
En resumen…
Una terapia de pareja verdaderamente inclusiva no pone condiciones para escuchar y acompañar: abraza la complejidad, reconoce la diversidad y trabaja con cada pareja desde el respeto, la ética y el compromiso con su bienestar.
En CAPI creemos que toda historia merece ser contada y que cada vínculo merece la oportunidad de crecer, sanar y transformarse.
Referencias: