Es decir, en esa búsqueda de explicaciones externas, los padres se olvidan de los elementos más importantes para la estimulación del habla en un niño, de esas respuestas o acciones tan sencillas que no se analizan o aplican en la cotidianidad.
En primera instancia partimos de la importancia que tiene que los padres de familia tomen conciencia del papel principal que tienen en el proceso de desarrollo del habla de los niños; que reconozcan que son la fuente principal de estímulos para sus hijos y que es a partir de ellos que los infantes obtendrán y desarrollarán las habilidades para comunicarse con su entorno.
Un vínculo importante entre los niños y los padres es la voz. Se recomienda establecer comunicación constante con el niño, expresar sentimientos, emociones; dar nombre a todo cuanto vean sus ojos, cantarles, leerles, darles instrucciones de menor a mayor complejidad siempre acompañados de una gesticulación expresiva, movimientos corporales y procurar estar ubicados a la altura del niño (cara a cara). Los niños aprenden a hablar escuchando cómo hablan los demás.
Los niños aprenden a hablar cuando se sienten escuchados. Una forma de propiciar el habla de un niño es hacerle saber que para nosotros es importante lo que nos dice. Un niño siente la necesidad de hablar cuando identifican que la comunicación tiene una función: como el solicitar algo que necesitan, comunicar sus sensaciones, decir lo que piensan, etc., por lo que se recomienda no coartar esta necesidad anticipando lo que ellos quieren, siendo traductores de sus necesidades ante los demás, reaccionando a gestos o señas sin necesidad de escuchar una emisión oral de su parte, es decir, debemos estimular el interés de expresarse dándole sentido a la comunicación.
La mejor forma de interactuar es el juego. Una forma de estimular el habla mediante el juego es utilizar la comunicación como un puente que permita desarrollar habilidades de convivencia, de respeto de turnos, de exponer ideas, y expresar preferencias. Asimismo, la interacción incluye la estimulación de los sentidos, donde se juega con los colores, las formas, las canciones, la experimentación, el tacto, el olfato, etc.
Así pues, se sugiere a los padres de familia no olvidar estos consejos prácticos para la estimulación del habla en sus pequeños. Hay que hablarles con claridad, buen ritmo, dando énfasis a la entonación y procurar siempre mantener la atención del niño en la situación comunicativa.
Licenciada en Pedagogía con título otorgado por la Universidad Nacional Autónoma de México. Es Licenciada en Pedagogía en el área de Psicopedagogía por la Universidad Autónoma de México (UNAM). Pasante de la Maestría en Pedagogía por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Terapeuta de Lenguaje y aprendizaje con 12 años de experiencia, actualmente trabajando como Terapeuta de Lenguaje y Aprendizaje Individual y en la Secretaría de Educación P´blica (SEP).