Hay también quienes, (…) más que migrar, huyen.
Óscar Martínez
Por las razones anteriores se busca el sueño de tener una buena calidad de vida, pero emigrar genera otros retos, desde el cómo hacerlo y los peligros del trayecto hasta la incertidumbre y soledad de estar en un nuevo lugar.
En este artículo me enfocaré en la preparación del viaje y la separación.
Normalmente, debido a las condiciones precarias del país de origen es que se toma la decisión de emigrar hacia a un lugar en donde se espera que se tenga acceso a una mejor calidad de vida. No obstante, al emigrar se sabe que habrá condiciones adversas e incluso violentas, que se opta por normalizarlas porque la vida en su país es todo menos una vida.
Lo que trae como consecuencia ansiedad y depresión, traumas y deficiencia en la salud física.
Y las consecuencias a la salud son las mismas que las mencionadas anteriormente, sumando el miedo y la pena por el cambio.
Emigrar es una decisión muy difícil y solo es el inicio de un proceso que pondrá a prueba la resistencia física y mental.
En la mitología griega se cuenta el viaje de Ulises (también llamado Odiseo) de regreso a Ítaca; un viaje lleno de retos y pruebas que afrontar para conseguir su objetivo.
Es por eso que, en Barcelona un grupo de médicos retoman a este personaje, ya que investigan el impacto a la salud mental en personas migrantes. Utilizan esta historia como metáfora para nombrar la serie de síntomas que presentan los migrantes que, al igual que Ulises, deben afrontar situaciones de riesgo en su camino. Estos síntomas son:
Además de los duelos por la pérdida de la familia, de los lazos de la comunidad, de su país, de su trabajo, amistades y todo lo que conlleva.
Quien migra debe despedirse de todo lo conocido y de los años de vida. Reconoce que los problemas sociales son más grandes y tiene que recomponerse y buscar en otro lugar esas oportunidades que no ha tenido.
Las implicaciones emocionales son vastas, por ello es necesario impulsar los factores protectores.
El acompañamiento será la clave para llevar esta transición. CAPI te acompaña si tú o alguien cercano está pasando por esta situación.
Referencia:
Psicoterapeuta, tanatóloga y psicóloga con 12 años de experiencia, desde el enfoque cognitivo conductual, integral y humanista existencial. Además, de desempeñarme profesionalmente en las áreas de psicología educativa, capacitación, desarrollo