También ha sido un año de alegrías y aprendizajes vividos. Uno de los grandes retos para todos durante este año ha sido entrenar la capacidad de adaptarnos al cambio y navegar en la incertidumbre: indicadores de nuestra salud mental.
Nueve meses (y contando) de confinamiento que invitan a reflexionar sobre lo que hemos trabajado durante este año.
Este 2020 ha sido un año de descentrarnos de nosotros mismos y pensar en la interdependencia económica, emocional y de salud en la que todos estamos involucrados en la sociedad.
Dejar atrás el egocentrismo y el interés personal por el bienestar de la sociedad.
Este año ha sido una gran invitación a entrenar la cualidad de la empatía, la solidaridad y el respeto.
La importancia de la tecnología durante todo este año 2020 ha sido fundamental. El teletrabajo ha permitido a la gran mayoría de las personas trabajar en homeoffice, instituciones educativas dando clases en línea, centros de salud, entre otros.
La pandemia impulsó el teletrabajo y la digitalización dejó de ser una opción para convertirse en la opción más viable en que los negocios podían continuar.
Esta aceleración a la digitalización nos ha llevado a aprender y a expandir nuestros horizontes.
“No es la especie más fuerte la que sobrevive, ni la más inteligente, sino la que responde mejor al cambio”.
Los tratamientos psicológicos en línea durante este año han sido muy exitosos demostrando su eficacia, rompiendo los paradigmas preexistentes ayudando a muchas personas a manejar sus niveles de estrés, ansiedad, depresión y angustia.
Somos seres sociales, necesitamos del otro para poder vivir a nivel físico, mental y emocional.
Por eso hoy más que nunca ante tanta incertidumbre, necesitamos sentirnos acompañados, escuchados y contenidos.
La esperanza es la antorcha que guía los procesos psicoterapéuticos, que nos impulsa al cambio y a caminar con confianza en los momentos difíciles y complicados de la vida.
Cerremos agradeciendo este 2020 por todo lo que nos permitió ver, analizar, aprender y reflexionar, revalorizando la importancia de los vínculos, el contacto humano tan trastocado en estos doce meses y sigamos cultivando el respeto, la empatía, la responsabilidad, la paciencia y el bienestar social.
Iniciemos este nuevo año 2021 llenos de esperanza y confianza en la vida.
Te invito a CAPI con nuestros excelentes especialistas a seguir llenando tu vida de aliento, alegría, fuerza y esperanza a través de un proceso psicoterapéutico.